Siempre me fascinaron los mapas con estados y territorios, con países y capitales... ver la evolución de los pueblos y los imperios; quién conquistó a quién y cómo se influenciaron... las guerras que sostuvieron, y sostienen, los pueblos por ponerle nombres y derechos a las tierras que estaban ahí desde antes que el hombre existiera, pero también por los derechos a las decisiones que cada pueblo va tomando y que le van dando identidad y, por tanto, diversidad a nuestra especie.
No me considero, para nada, un estudioso del tema - simplemente quiero exponer algunas cosas que me han parecido curiosas y, por supuesto, sin herir susceptibilidades - no trato de respaldar ni atacar ningún punto de vista, nación o lo que sea. Les pediré a mis lectores, pues, me perdonen y me indiquen si desvarío de esta regla que me impongo, con la condición de que sean también respetuosos con sus comentarios. Sea pues.
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Bolivia.
Bolivia nunca fue un estado petrolero por excelencia. Hoy en día, Bolivia sigue siendo, según lo veo yo, un país que lucha por salir de un rezago común a muchas naciones latinoamericanas. Hoy día los bolivianos están haciendo algo así como una reingeniería, apostándole a una nueva organización, según lo entiendo (un "estado autonómico", cuya definición desconozco).
Pero alguna vez, en el inicio de los tiempos latinoamericanos, Bolivia era diferente. Voy a tratar de resumirlo en unas cuantas líneas.
El altiplano boliviano ya era territorio esplendorosamente inca para cuando los españoles llegaron. Éstos incorporaron el territorio a su imperio, colocándolo como la Audiencia de Charcas, dependiente del Virreinato del Perú (y luego del del Río de la Plata), y comenzaron a extraer plata, de la que dependió la economía local.
Llegó el siglo diecinueve y con él, la ola independentista de América Latina. Aunque la independencia se proclamó en 1809, fue hasta que Antonio José de Sucre finalmente derrotara a los españoles que se proclamó la independencia, en 1825. Ya unos años antes Perú había sido independizado por Simón Bolívar, y de hecho el Congreso del entonces todavía "Alto Perú"decidió nombrar en su honor al país.
Yo imagino que ganar una independencia "por las malas" (o sea, con guerra de por medio) es como tener un trabajo de parto, laaaargo y complicado. Pues a América Latina le vino el parto al principio del XIX y los dolores les duraron a ella y a los niños durante más de 100 años. Bolivia no fue la excepción: Perú y Bolivia se unieron en una confederación durante un tiempo, y juntos se pelearon con Chile (y su aliada Argentina); tras una serie de victorias y derrotas, la Confederación perdió y se desintegró. Luego hubo una invasión para tratar de reunificarla, que tampoco tuvo éxito. Más tarde, Bolivia perdería su salida al mar ante Chile (un tema que sigue siendo cuestión de debate), así como el territorio de Acre (una sección de selva, rica por su producción de goma) ante Brasil, que lo instituyó en estado.
Así que Bolivia estaba empobrecido. Sin salida al mar, con cada vez menos recursos económicos y dos millones y medio de habitantes, muchos de los cuales estaban en la pobreza, la cosa estaba fea. Pero la gota que derramó el vaso fue la guerra ante Paraguay; eso fue ya a principios del siglo XX - más específicamente de 1932 a 1935. Se le llama la Guerra del Chaco.
El Gran Chaco es una región vasta y, por entonces, escasamente habitada. La planicie es ideal para la ganadería y la agricultura, comparable (en calidad, aunque no en tamaño) a la Gran Planicie de los Estados Unidos. Súbitamente, Bolivia y Paraguay se interesaron en ella. ¿Por qué?
Paraguay también se había metido en guerras para entonces. Había perdido territorio ante Brasil y Argentina y también estaba empobrecido. Paraguay había comenzado a establecer poblaciones en su zona noroeste (o sea, el Chaco), aprovechándolo para convertirlo en el primer productor de yerba mate (de la que se hace un té que, según mi "hermana" argentina Claudia, sabe riquísimo)... obviamente la importancia no era el te en sí =P, sino las exportaciones del mismo.
Por otro lado, Bolivia reclamó: "ese territorio era de la Audiencia de Charcas, así que nos toca", dijo. Otra variable muy importante aquí es: Bolivia y Paraguay ya no tenían costa (bueno, Paraguay nunca tuvo), y sobre todo en aquellos entonces, quien dice "no costa" dice "no exportaciones". El control del Río Paraguay (no solo acceso: control) sería de quien dominara el Chaco. Así que los dos países comenzaron a verse feo.
El área en disputa. Gracias, Wikimedia Commons.
Pero la chispa no habría ardido tan ferozmente si no añadimos una variable más. Una negra, espesa y yankee variable: comenzó a estimarse que el Chaco era rico en petróleo. Sí, petróleo.
Esto es lo que me llama la atención. Evidentemente no es la primera vez que el petróleo enciende guerras. Esto fue hace casi cien años... y no aprendemos. Nos seguimos dejando influenciar. Y es que lo más curada es que, ganara quien ganara, iba a ganar Estados Unidos: la Shell patrocinaba a Paraguay; Standard Oil (que dio origen a Exxon/Mobil, Chevron y la desaparecida Amoco) a Bolivia.
Soldados en la Guerra del Chaco. Tomada de aquí.
¿Quiénes pelearon realmente? Los indígenas de ambos bandos: en Paraguay, tal vez más por nacionalismo que en el otro bando, pues la mitad de la población del país, aún hoy, es de ascendencia guaraní. El fuego enemigo acabó con muchos, pero fueron más quienes murieron por las tragedias naturales - los soldados estaban simplemente impreparados.
Al final, el resultado fue desastroso para ambos países, al corto plazo. Sin embargo, creo que en el largo plazo, hubo una justicia poética. Paraguay retuvo tres cuartos del Chaco, aunque Bolivia alcanzó a tener un puerto sobre el río Paraguay (Puerto Suárez, en el departamento de Santa Cruz).
En Bolivia, la gente se dio cuenta de que se necesitaba un cambio de fondo y surgió el Movimiento Nacional Revolucionario, marcando un cambio de rumbo en el país, entrando de lleno en su transformación (como México la tuvo también más o menos en los mismos años).
Estados Unidos... ellos se quedaron sin nada, pues al poco tiempo se descubrió que realmente no hay yacimentos en el Chaco.
Podría decir muchas cosas ahora, pero prometí neutralidad... He aquí, sin embargo, cómo la historia nos puede ayudar a comprender la actualidad, y cómo la historia es cíclica. *cof cof * Medio Oriente *cof cof *
Hoy, Bolivia sigue siendo una nación valiente, luchando por su propio porvenir (y Paraguay también, de hecho). Si tengo lectores por allá, un abrazo a todos.
4 comentarios:
Alguna razón por la cual iniciaste con Bolivia?
No, realmente no ^_^
Interesante el cuentico, pero; ¿donde quedo la Shell? y el petroleo del chaco ¿se seco?
Interesante. Siempre es bueno encontrar Noticias de Bolivia en la web. Un saludo
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